Uno de los procesos industriales más utilizados en la actualidad es el mecanizado. Una amplia variedad de empresas de todo tipo lo emplean y requieren de manera cotidiana en sus diferentes procesos. Ya se trate de una industria del automóvil, aeroespacial, ferroviaria o cualquier otra que necesite de una o varias piezas con una geometría y dimensiones determinadas.
¿A qué se le llama mecanizado y cuáles son sus beneficios?
El mecanizado se refiere a un conjunto de procesos industriales encargados de modificar, moldear o transformar una determinada materia prima. Se utiliza principalmente en metales y se consigue mediante la eliminación de material indeseado a través de diferentes técnicas y máquinas-herramientas. La finalidad es lograr una pieza industrial determinada. Es por eso que el mecanizado puede definirse como un proceso controlado que toma un material y lo transforma para darle otra forma y tamaño final deseados.
Como se mencionó antes, muchas veces se lleva a cabo mediante procesos que se encargan de la eliminación de material excedente utilizando técnicas como cortes, perforaciones, pero también la adición de material. Para ello se llevan a cabo dos tipos de movimiento, el de corte o de penetración, para retirar el excedente de material, en tanto que el de avance se encarga de dirigir la trayectoria de la pieza en cuestión mientras se lleva a cabo un movimiento determinado.
El mecanizado no solo se realiza en metales, sino también se puede hacer con materiales como madera, cerámica, plástico y materiales compuestos.
¿Cómo surgió el mecanizado?
Aunque los procesos de mecanizado se han llevado a cabo desde la Antigüedad utilizando diversas herramientas, como piedras y madera, han sido tan útiles que continuaron a lo largo de la historia de la humanidad. Por ejemplo, en Egipto se usaban taladros rudimentarios que no solo perforaban, sino moldeaban piedras e incluso metales. Para la Edad Media estos procesos de mecanizado ya se habían refinado, pero no se empleaba el término como tal.
La palabra mecanizado se utilizó por primera vez a mediados del siglo XIX, y describía el uso de una máquina para procesar materiales hasta que adquirieran cierta geometría deseada. A medida que el uso de máquinas se hizo más común, éstas realizaban más procesos de mecanizado. Así fue como surgió el torneado, el taladrado, el fresado, el aserrado, el roscado, entre otros, que hoy en día se les considera procesos tradicionales. Actualmente, el mecanizado moderno tiene como pilar tres procesos principales: torneado, taladrado y fresado, pero existen otros procesos que se agrupan ahí, en los cuales por lo general usan una máquina o herramienta moderna, como el brochado y el serrado.
¿Por qué es importante el proceso de desbaste en la actualidad?
Las operaciones de torneado en el mecanizado moderno hacen que el material gire contra la herramienta de corte (un torno). Gracias a la tecnología actual, esto es controlado por una unidad central de computadora (CNC), lo que se conoce como automatización de procesos y gracias a ello es posible realizar especializadas técnicas de corte de metales para todo tipo de industrias. Por eso se encuentran empresas de mecanizado, decoletaje industrial, mecanizado de alta precisión y grandes mecanizados.
Lo anterior se lleva a cabo mediante diferentes procesos como abrasión, o arranque de viruta. Las ventajas del mecanizado tienen que ver con su elevada precisión y logro de una infinidad de piezas de diferentes conformaciones, geometrías y acabados. Se trata de un proceso que requiere de mucho menos tiempo que antaño y que además de todo no requiere de un operador manual para llevarlo a cabo.
¿Qué herramientas y procesos intervienen en el mecanizado?
En el mecanizado actual, las operaciones de fresado tienen una pieza de trabajo fija cortada por una herramienta giratoria controlada por ordenador. Las fresadoras son de las principales herramientas de mecanizado utilizadas y prácticamente todas ellas son máquinas CNC.
Entonces, las operaciones de perforación van más allá de una taladradora estándar, empleada en el mecanizado manual tradicional común. El mecanizado de hoy en día usa una taladradora operada por control numérico computarizado o CNC, mediante el cual los orificios se producen o refinan mediante el uso de un cabezal de corte giratorio en contacto directo con una pieza de trabajo fija que está sujetada o asegurada a una base.
¿Dónde solicitar un proceso de mecanizado profesional?
En Umesal nos especializamos en el sector del mecanizado de piezas y maquinaria. Tenemos más de 25 años de experiencia y contamos con técnicos cualificados y especializados en todo lo referente a mecanizados: desde tornillos hasta piezas para prototipos usados en investigación o aeronáutica. Nosotros tenemos la capacidad de dar respuesta oportuna y personalizada utilizando diversas herramientas y procesos de última tecnología y con todo gusto te daremos el asesoramiento que necesitas. Contacta con nosotros y conoce todos los servicios y sectores que abarcamos. Nuestro taller está situado en Moncada, Valencia.